Pablo Iglesias es Rey desde 2013

Pablo Iglesias (más famoso que Julio), del que voy a presuponer su bondad, debería reconocer públicamente que está donde está gracias al sospechoso (y recalco lo de sospechoso por no decir claramente que ha sido aupado, por supuesto, por intereses de personas no muy de izquierdas) apoyo mediático-televisivo que ha recibido, con la injusticia que ello supone para con los demás partidos que empezaron la campaña electoral y la presencia de sus líderes en los medios desde la fecha de inicio de la misma. Y lo digo señalando a los masones políticos de España y a la Reina Sofía de España asistente a numerosas reuniones del Club Bilderberg. No, las cosas no pasan por casualidad. Hasta donde llego por mi juventud e interés por la política, todo empezó con la quema de fotos del Rey en Cataluña y la desproporcionada sanción a los responsables, reconociéndose así que el descontento hacia el Rey tomaría otros tintes no tan convergentes en la esfera política catalana. Una vez que se ha disuelto ETA, sin razón aparente que lo justifique, es decir, no por méritos hechos desde Madrid, sino que se disuelve por si sola, como si fuese una empresa más que desaparece con la crisis. Eso trae consigo, que ser formen nuevos partidos, pudiendo cambiar de nombres, pero no la idea de un estado descentralizado y tener una gran masa de votantes, Donostia está de ejemplo.

El cambio de presidente del gobierno era algo inevitable, el anterior, Zapatero fue responsable de ahondar la crisis, pero actuó bien a ojos de los de arriba, también asistió al Bilderberg, pero no nos salgamos de la política «for dummies». Llegó el otro, Rajoy, evidentemente con la mayoría absoluta que se requiere para contentar al máximo a los de arriba, llamémosle Europa. Pudiera pensarse que incumplir todo su programa electoral llevaba consigo acrecentar el odio de los separatistas, pues por supuesto. Raro es el día que el PP no diga una tontería sobre el «problema» idiomático en Cataluña que, como todo el mundo sabe, es todo mentira pero bien cotorreada en los medios. Y Laporta no ayudaba…

Volviendo a lo del Rey, tocaba mover los hilos para irlo desprestigiando, para que los monárquicos que aún lo fueran, se lo pensaran y los jóvenes ni lo pensaran. Ya sabemos: Urdangarín, infanta, elefantes de Botswana, y demás cosas que se me escapan mencionar. Y creo que hay gente que sabe que por su delicada salud, la posibilidad de instaurarse una República debería ser ahora. Nadie dice que no puedan hacer una República en la que la figura del Rey siga existiendo, todo dependerá del interés político.

En definitiva, están confluyendo fuerzas políticas centrífugas con mayor fuerza, la televisión lleva a la palestra ideas republicanas, sobre todo LaSexta, las películas españolas hablan de la II República a todos los públicos, etc.  Tendremos la mejor república que el dinero pueda traer, pero si la trajese un PUEBLO LIBRE sería mucho mejor. Aún hay esperanza.

Aprendamos una nueva palabra, señores votantes:

Retórica: Arte de expresarse con corrección y eficacia, embelleciendo la expresión de los conceptos y dando al lenguaje escrito o hablado el efecto necesario para deleitar, persuadir o conmover.